La vida no esta en otra parte

Esta semana estuve sola ya que Mike estaba en Washington. Asi es que decidi ir a Londres a capear mi soledad. No hay mejor lugar para eso. Esa ciudad es inagotable, absolutamente desbordante, incluso me baja como angustia cada vez que voy en onda paseo, me viene a la mente ese dicho:

" Mientras mas te conozco menos se de ti". Bueno, tal vez el dicho no es exactamente asi pero sino existe, entonces lo acabo de inventar y es exactamente lo que Londres me hace sentir.

Es una ciudad abrumadora, no he tenido este sentimento en otra ciudad. Ni en Paris. Ni en Roma. Paris es abarcable , caminable y despues de dos visitas uno empieza a elegir los lugares que mas le han gustado ( que jamas sera la Torre Eiffel ) para repetirselos. Roma es adorable, mi favorita, pero casi provinciana al lado de Londres.

Esa sensacion de estar siempre perdiendome de algo solo la he sentido alli.

Uno va en el metro camino a... nose...una exposicion de pintores holandeses en la National Gallery... uno va de lo mas contento, cuando derepente, al subir por las escaleras mecanicas ve cientos , si, cientos de posters anunciando musicales, exhibiciones especiales en los museos, recitales , expociciones ..ufffffffff y entonces me vuelve la angustia. Mas tarde, uno decide ir a tomar o comer algo y tus amigos te preguntan, por ser extranjera probablemente , adonde te gustaria ir. Entonces hay que tomar una decision y viene otra vez la angustia: si vamos al Soho nos perderemos Covent Garden , o Notting Hill o Chelsea o Camden Town . En Paris eligire casi siempre Saint Germain u Overkampf sin vacilacion alguna. Que me pasa con Londres entonces? Soy yo o es la ciudad?

Sin duda Londres es una ciudad donde pasan cosas, miles de cosas y esto se siente, se respira, esta en el aire, y es como una metafora de esta vida moderna: uno lo quiere todo, no quiere perderse nada, pero eso es imposible. Ya lo sabemos. Por eso, en esta ultima visita decidi dejar las ansiedades aqui en casa , en Sheffield, y me propuse metas. Jugaria a ser turista.

He estado mas de 10 veces en Londres y salvo galerias como el Tate Modern o la National Gallery, no habia pisado un museo jamas. Entonces comence por el Natural History Museum.

Mi visita duro como 1 hora...mucho nino gritando ( el museo es casi totalmente interactivo y tiene unos animatronics de dinosaurio que te hacen sentir en Disney World o en un concurrido Jurassic Park ) y definitivamente demasiado tuirista americano y japones. Mi paciencia ya esta agotada al respecto. Para deshacerme del dolor de cabeza, me puse a caminar sin rumbo, o mas bien, sabia que iba en direccion a Kensington Gardens pero no estaba en mis planes ninguna visita en especial. La ciudad en si es un museo y tiene esos gigantes pulmones verdes que la hacen tan acogedora. Pasee por Hyde Park me la tome con calma zen, luego Kensington y fui ahi donde sucumbi de nuevo: habia una exhibicion especial en honor a Diana de Gales. Sus vestidos, su historia tan manipulada, y las fotos que Mario Testino tomo de ella para Vogue. Todo esto en el palacio donde ella vivio: Kensington. Cuando sali, segui caminando, iba descubriendo mas de Londres. En cada esquina hay algo que pertenece a nuestra memoria colectiva. Lo hemos visto en una pelicula, o en las noticias o leido sobre ello. Asi que decidi que no mas museos. Camine y camine. Y recorde que una amiga, Lisa, el ano pasado me habia mostrado la libreria donde trabaja Hugh Grant en la pelicula NottingHill, pero ibamos en auto esa noche y no pesque mucho. Pero esta vez, queria encontrarla, y no descanse hasta que la encontre. Ahi estaba en medio de muchas otras de esas pequenas tiendas, pintorescas e irresistibles. Nota: averigue que Hugh nunca estuvo ahi, filmaron la libreria por fuera y se basaron en ella, pero todas las escenas de Julia y Hugh fueron filmadas en estudio. Igual me senti satisfecha, la encontre y casi podia escuchar la cancion " She" como musica de fondo.

Descubri entonces , que Londres es como la vida misma: hay que disfrutarla, a concho, pero tomarla con calma, como viene, ponerse metas, y si estas te defraudan o no eran lo que tu esperabas, pues habra que fijarse una nueva meta. Hay que tomar deciciones y no mirar para atras una vez que las tomas. Al final del dia...sera siempre la decision correcta.

Por eso, cuando esa tarde mi amigo Manuel me llamo y me pregunto adonde nos juntabamos a tomar algo, le dije sin vacilaciones: Covent Garden. Y no me arrepiento.