El regreso

He regresado. Despues de tres dias en Paris, tome el avion hacia Chile. Tal vez como para no hacer el regreso tan brusco decidi visitar a mis amigos parisinos y Paris como siempre fue acogedor y reconfortante, mas que otoño parecia primavera y me di cuenta que ya hace tiempo que no me siento una turista en esa ciudad. Ya no existe esa ansiedad por ir a ningun lado en especial y solo disfrute el estar ahi, caminar, tomar un rosè en un bistro, ir al Sephora de los Champes Elisees a comprar mi labial Bobbi Brown y mi sombra Shu Uemura, ir a comer una ensalada "tatin de chevre" y juntarse con los amigos para ponerse al dia. El parentesis necesario entre mis dos hogares, el nuevo en Inglaterra y el de mi pais. Todo bien...hasta ...llegar al aeropuerto. Me habia preparado entrando al sitio web de British Airways, para asegurarme de estar clara con todas esas nuevas reglas impuestas despues de los fallidos intentos terroristas. Aunque me he preguntado desde entonces que tan fallidos fueron esos ataques. No volaron aviones ese dia pero nos cambio la vida y se acabaron la poca paz y confianza que quedaban. Viajar ya dejo de ser placentero, por lo menos en avion.
Llegue a Charles de Gaulle, que para variar esta en un estado caotico , ya terminaron de arreglar el terminal 1 pero ahora habia que caminar entre andamios y vallas antes de entrar al terminal 2. Me encamine al counter de British , era temprano, asi que la fila era razonable. Me atendio una mujer, que me advirtio que si tenia cosmeticos en mi equipaje de mano debia sacarlos, nada de cosmeticos. Segun el sitio web de la compania se podian llevar cosmeticos que no fueran liquidos, pero ella insistio en que no podia, pues las reglas de la compania en Francia eran diferentes a las del Reino Unido y eran diferentes si viajaba y me quedaba en el Reino Unido que si iba en transito a Londres Heathrow, que era mi caso.
Su consejo fue entonces poner los cosmeticos en mi maleta, lo que para casi cualquier mujer no es demasiado agradable, pero preferible eso a arriesgarme a que me los quitaran en alguna parte de mis tramos y perderlos definitivamente. Cuando me vio sacar los cosmeticos de mi mochila se le ocurrio que debia medir mi mochila en una especie de canasto que tienen a la entrada de los counters....Decidio entonces que era demasiado grande pues aunque entraba en el "canasto" uno de los bolsillos quedaba fuera. " No puede llevar eso como equipaje de mano" la oi decir. Mantuve la calma, uno no puede mas que ser obediente con esta gente, mejor no arrebatarles la unica oportunidad que tendran de sentirse importantes, asi que desdoble la cartera que traia amuñada en la mochila y comence a elegir las cosas, que a mi juicio, eran las mas indispensables para llevar por mano: I Pod, las pocas joyas que tenia alli, camara, escobilla de dientes, pen driver con mis archivos y no mucho mas. Para luego ver como ambas mi mochila y mi maleta desaparecian por la correa transportadora. Una sensacion terrible de inseguridad se apodero de mi y no sin razon. Muchas de las cosas que general mente consideraba indispensables se iban alli, pero ahora son las lineas aeras la que deciden como se viaja y que es importante para uno, ¡punto para los terroristas ! la confianza volo por los aires ese dia de julio.
Ademas yo habia estado preparando mi maleta durante dias tratando de hacer calzar los 23 kilos que me habian dicho que eran los permitidos...y otra sorpresa que podria haber sido buena en otras circunstancias: Podia llevar dos piezas de equipaje de 30 kilos cada una. Si hubiera sabido esto antes, me hubiera ahorrado horas de angustia eligiendo que era mejor dejar atras o que dejarle como "cacho" a Mike para que el me lo traiga en tres semanas mas. Una vez en el aeropuerto esta noticia ya daba lo mismo. Trop tard .En estos momentos es tanto el caos, que no solo depende de las reglas que tengan las distintas lineas aereas, sino que depende del pais desde donde salgas , el pais hacia donde vas, el aeropuerto donde estaras en transito e incluso " last but not least" , la persona que te toque en el counter. Una vez en el avion y aun en las salas de embarque, las historias personales respecto a las odiseas vividas para llegar hasta alli se entretejen e intercambian como una manera de vomitar la rabia y la impotencia, ya nadie lo pasa bien en los aeropuertos, las duty free estan vacias y los viajeros estresados. Esa atmosfera de relax , algo magica , que por lo menos para mi solian tener los aeropuertos, ha desaparecido.
Heathrow no fue problema, aparte de tener que sacarse los zapatos al pasar por rayos X, los ingleses estan mas amables que de costumbre, como si pidieran perdon por todos las molestias.
En Ezeisa ya se respiraba otro aire sin embargo, nadie se preocupo ahi ni siquiera de pasar mi cartera por rayos, el terrorismo no habia tocado Latinoamerica al parecer, y ahi reencontre la magia perdida de los aeropuertos .
Subi al avion, faltaba el ultimo tramo. Despues de una hora aparecio la Cordillera, esa Cordillera que siempre me impacta al regresar y a cuya belleza nunca me acostumbro, menos mal. Larga fila en Pudahuel y la sorpresa final al llegar a la correa transportadora: mi equipaje al igual que el de todos los que habiamos hecho transbordo en Londres, no habia llegado. Algo me lo habia dejado intuir al poner mi mochila en la correa del counter en Charles de Gaulle. Solo veria mis maletas con todos los regalos y recuerdos de estos 4 meses al dia siguiente bastante tarde.
Y aqui estaba en un Santiago frio y gris, sin mis maletas , que habian quedado en Londres segun me dijo la niña de LAN , como si ellas hubieran querido retrasar y alargar este regreso.